- 250 gramos de harina
- 150 gramos de mantequilla
- 100 gramos de azúcar
- 2 yemas de huevo
- Sal
PREPARACIÓN:
Con todos estos ingredientes se elabora una pasta que se trabaja hasta que quede muy lisa, y se deja reposar un par de horas en lugar fresco. Entonces se le pasa el rodillo de hacer pasteles ( esplvoreándola antes con harina) y se deja lo más delgada que sea posible. Se corta a redondeles, y se cuecen los sables sobre bandejas untadas de aceite, a fuego muy moderado para que no se abrasen.
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